Allí pudieron ver no sólo el famosísimo "Belén de chocolate", sino también algunos patios cordobeses, la fábrica de "mantecaos", la destilería de anís, alguna bodega, el museo del azúcar y el museo del jamón.
A la vuelta, paradita en Iznájar para deleitarse con las vistas de su pantano a la luz del atardecer.
Un viaje bien aprovechado, sí señor.
(Las fotos de la galería son cortesía de Dª Elena de Luna)
1 comentario:
Muchas GRACIA Elena, yo no pude hacer fotos y gracias a ti podemos disfrutar de la imagenes de ese dia. Un dia genial.
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